¿Qué ocurre con la relocalización de las familias y cuál es el rol de ACUMAR?
Por Bárbara Ojeda
La Cuenca Matanza-Riachuelo es uno de los sistemas hídricos más importantes de la región del AMBA, y a la vez, una de las zonas más afectadas por la contaminación ambiental. La misma abarca 14 municipios provinciales (Marcos Paz, Ezeiza, Cañuelas, General Las Heras, San Vicente, Presidente Perón, La Matanza, Merlo, Morón, Esteban Echeverría, Almirante Brown, Lanús, Avellaneda, Lomas de Zamora) y parte de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Comunas 4,7, 8 y 9), por lo que hay una gran cantidad de organismos gubernamentales que tienen injerencia en la Cuenca. Según los datos del Censo 2010, en esta zona se encuentran viviendo aproximadamente 6.000.000 de personas, las cuales se encuentran viviendo en situación de hacinamiento debido a la falta de agua potable y cloacas, el aire contaminado, y por la ausencia de una recolección domiciliaria de residuos.

Ante esta situación, el 8 de julio de 2008, la Corte Suprema sancionó un fallo que responsabilizó a la Nación, Provincia y CABA por las condiciones en las que se encontraba la Cuenca Matanza-Riachuelo. Así, se los obligó a trabajar para resolver esta problemática de manera articulada, llevando a cabo acciones en conjunto. La Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) es el ente interjurisdiccional que tiene la facultad de coordinar políticas públicas entre las Comunas de CABA y los 14 municipios provinciales, con el fin de mejorar la calidad de vida de quienes viven allí mediante el Plan Integral de Saneamiento Ambiental de la Cuenca del Río Matanza-Riachuelo. A su vez, en 2010 se firmó el Convenio Marco para el cumplimiento del Plan de Urbanización y Asentamientos Precarios en Riesgo Ambiental de la Cuenca Matanza Riachuelo que tiene como objetivo la liberación del Camino de Sirga, asistiendo a 17.771 familias en riesgo ambiental y social con soluciones habitacionales.
A más de 10 años del Plan de Urbanización y Asentamientos Precarios es crucial preguntarnos cuáles fueron los avances y acciones realizadas por ACUMAR para brindarles soluciones habitacionales a las familias. Con las relocalizaciones de los asentamientos que se encontraban sobre el camino de sirga se esperaba que las familias pudieran acceder a una vivienda digna con buenas condiciones de habitabilidad, pero la realidad es que los resultados obtenidos al día de hoy no son significativos. Para diciembre del 2011 había 9.395 soluciones habitacionales del Plan de Viviendas en formulación: 7.515 a iniciar/en ejecución y 861 terminadas; 10 años después, en diciembre de 2021, 5.806 soluciones habitacionales, lo que abarca tanto la construcción de viviendas nuevas así como el reordenamiento parcelario, la apertura de calles, el tendido de redes de agua y cloaca, entre otros, se encuentran efectivamente terminadas, es decir, solamente 5.000 más que en 2011. Además, 2.172 se encuentran a iniciar/en ejecución y 4.337 en formulación, es decir, soluciones habitacionales que, si bien ya presentaron proyecto a la fuente de financiamiento, todavía se encuentran contemplando alguna de las etapas previas a la firma del convenio; y 5.456 sin gestión, o sea, son soluciones habitacionales que están comprometidas con el Convenio Marco, pero que ni siquiera cuentan con un proyecto presentado a la fuente de financiamiento (ACUMAR, 2022).
La gestión del Plan de Viviendas 2010 deja entrever la existencia de un organismo que no puede hacer frente al objetivo con el que fue creado: elaborar políticas públicas para cumplir con los objetivos propuestos por el Convenio Marco. Esto es un gran problema ya que el hecho de que las familias no se puedan relocalizar hacia otros barrios aumenta la exposición de las mismas a la contaminación ambiental, lo que termina derivando en enfermedades que afectan la salud de los pobladores como trastornos gástricos, pulmonares y dermatológicos. Por otro lado, al ser ACUMAR un ente tripartito, compuesto por Nación, Provincia y CABA ponen en juego intereses ideológicos y políticos opuestos, lo que dificulta aún más la toma de decisiones de manera conjunta ya que se termina dejando de lado el objetivo principal del Plan de Urbanización que es la relocalización de familias para mejorar su calidad de vida.
Otra causa del lento avance del Plan de Urbanización es que muchos de los gobiernos locales no cuentan con el personal necesario para llevar a cabo, de manera rápida y correcta, la relocalización de ciudadanos en riesgo ambiental. Esto no hace más que disminuir la cantidad de familias que pueden ser beneficiarias de las soluciones habitacionales.
Por otra parte, ACUMAR tiene el rol de incorporar a los habitantes de la Cuenca Matanza-Riachuelo a los servicios de red de agua potabilizada y a la red cloacal. Mientras para el 2014 la población incorporada al área con servicio de red de agua potable era de 3.178.733 personas y el área con servicio de red cloacal era de 1.889.201, para el 2021 aumentó en apenas 3.708.824, quedando casi un millón de personas sin ser incorporadas; sumado a que el área con servicio de red cloacal pasó a ser de 2.413.947, quedando fuera más de 2 millones de personas (ACUMAR, 2022). Se puede ver que gran parte de la población que vive en la zona de la Cuenca Matanza-Riachuelo aún no puede acceder a servicios básicos de buena calidad.
Otra cuestión importante a tener en cuenta para analizar cómo se fue configurando la problemática de la Cuenca Matanza-Riachuelo es el rol de la participación ciudadana. En el proceso de relocalización de las familias no solamente participan los diferentes niveles de gestión, sino que también lo hacen ONGs autorizadas, organizaciones barriales, y las mismas familias afectadas. Sin embargo, desde el sector público muchas veces no se tiene presente los intereses y demandas de las familias; sucede que algunas personas prefieren quedarse en la zona de la Cuenca, dado que al ser relocalizados en viviendas con título de propiedad y con todos los servicios básicos correspondientes deben pagar por ello grandes sumas de dinero que no poseen (Perelman, P y Fernandez Rey, L., 2014). Por eso, aquellas familias que formen parte del Plan de Urbanización deben ser adecuadamente informadas y consultadas sobre todo el proceso del proyecto, ya que el acceso a la información es un derecho básico que debe ser garantizado para todos y todas.
Es necesario que el Programa de Urbanización tenga en cuenta la condición económica de cada familia al momento de llevar a cabo las relocalizaciones para que no tengan que quedarse viviendo en una zona con alto riesgo ambiental. Además, los gobiernos locales deben tener presente las necesidades y aspiraciones de las familias afectadas sobre los diferentes pasos del Plan de Urbanización y actuar en base a eso. Por eso, se deberían realizar procesos participativos que sean realmente respetados y tomados en cuenta. No obstante, las familias deben tener garantizado el acceso a servicios de defensa legal y defensa pública para que sus voces sean escuchadas en caso de que no se llegue a un consenso entre los ciudadanos y los gobiernos locales. Por otro lado, también es necesario que los distintas jurisdicciones que intervienen y los distintos organismos que integran ACUMAR prioricen solucionar la problemática habitacional, a través de mecanismos de concertación de intereses contrapuestos.
Bibliografía:
Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (2022). Soluciones habitacionales en relación al Plan de Viviendas 2010. ACUMAR. Recuperado de: https://www.acumar.gob.ar/indicadores/soluciones-habitacionales-relacion-al-plan-viviendas-2010/.
Corti, M. et al (2020). La problemática de la Cuenca Matanza Riachuelo. Instituto IDEAS. Recuperado de: https://www.institutoideas.com.ar/wp-content/uploads/2020/08/Ambiente.-La-problematica-de-la-Cuenca-Matanza-Riachuelo-.pdf
Fragas, D. (2014). El Plan de Urbanización de Villas y Asentamientos Precarios para la Cuenca Matanza Riachuelo: Estudio de caso Villa Inflamable. Revista Estado y Políticas Públicas, 2 (2): 140-163. Recuperado de: https://repositorio.flacsoandes.edu.ec/bitstream/10469/8600/1/RFLACSO-EPP2-07-Fragas.pdf
Perelman, P y Fernandez Rey, L (2014). Análisis sobre el proceso de relocalización de los pobladores de las villas ubicadas en el camino de sirga de la cuenca baja del Matanza Riachuelo. Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales; Terra Mundus. Recuperado de: https://ri.conicet.gov.ar/bitstream/handle/11336/19190/CONICET_Digital_Nro.22998.pdf?sequence=1&isAllowed=y